Los factores de estrés, como el manejo, los cambios ambientales repentinos, el calor, los programas de alimentación y los cambios en la composición de la dieta, la vacunación, los desafíos de enfermedades, las infecciones y la respuesta inmunitaria deficiente están afectando la salud y la productividad de los animales.
Los animales poseen una resistencia natural e inmunidad limitadas a tal estrés que a menudo provocan un estrés oxidativo, cuando el animal ya no es capaz de desintoxicar a tiempo las especies de oxígeno reactivo a nivel celular. El impacto de tales factores de estrés se agrava y aumenta en presencia de (mico)toxinas.
Por lo tanto, necesitamos tecnologías integrales, con múltiples modos de acción y eficacia probada in vivo. Tecnologías integrales que pueden ayudar al animal a enfrentar varios factores de estrés bajo el prisma de una exposición concomitante a micotoxinas, incluso si esta última se considera baja. Como tal, Escent® S es una tecnología pionera en desintoxicación y alivio del estrés que ayuda a los animales a lidiar con factores estresantes tanto abióticos como bióticos a través de un enfoque holístico y multifacético.
Los datos in vivo respaldan los cinco modos de acción de la tecnología premium de desintoxicación y alivio del estrés Escent® S.
En el medio ambiente actual, la presencia de micotoxinas es un riesgo inherente. Existen muchas posibilidades de que múltiples mohos micotoxigénicos como Aspergillus, Fusarium y Penicillium y sus toxinas se introduzcan en los silos y el ensilado de maíz durante la cosecha y después del ensilaje. Una encuesta reciente destacó que el 99% de las muestras de grano recogidas contenían micotoxinas y más del 85% múltiples micotoxinas.
Hasta la fecha, se han identificado más de 400 tipos de micotoxinas, también diversos en su química y efecto en los animales. Los piensos contaminados con micotoxinas causan un amplio espectro de problemas que van desde la reducción de la ingesta de alimento y el rendimiento del crecimiento hasta deficiencias en la reproducción, salud e inmunidad. Los síntomas a menudo no son específicos y le cuestan al sector agrícola miles de millones de dólares al año.
Las micotoxinas de los piensos alimentarios también pueden terminar en productos animales destinados al consumo humano, como la leche, los huevos y la carne, donde permanecen estables y como moléculas tóxicas inertes.
La contaminación por toxinas múltiples es muy probable que ocurra en condiciones normales. Las toxinas múltiples pueden ejercer un efecto sinérgico, lo que aumenta el impacto negativo en el rendimiento y la salud del animal. Las toxinas de los hongos combinadas con las toxinas bacterianas aumentan significativamente los problemas de salud de forma negativa.
Las micotoxinas también pueden aparecer en forma conjugada ya sea soluble (micotoxinas enmascaradas) o incorporadas en / asociadas con / unidas a macromoléculas (micotoxinas conjugadas).
El muestreo y análisis de alimentación individuales, aunque a menudo se pasa por alto, constituye un factor crítico debido al alto costo y al relativamente largo tiempo de análisis que esto implica. Por lo tanto, este enfoque resulta bastante insuficiente o poco económico para proceder a una evaluación de riesgo completa. Por lo que la prevención es la opción favorita para un enfoque eficiente.
El primer paso para controlar las micotoxinas es evaluar la exposición a las micotoxinas. Aunque la amenaza de las micotoxinas está ampliamente presente en todas las granjas, existen herramientas limitadas para dilucidar la exposición real de los animales a las micotoxinas. Hoy en día, el análisis de alimentos es la estrategia más común implementada para describir el riesgo de micotoxinas. Sin embargo, la evidencia científica reciente sugiere que identificar la amenaza de las micotoxinas a partir del muestreo de alimentos es una ciencia imperfecta. Por un lado, los problemas para recolectar una muestra representativa, así como la distribución inconsistente de micotoxinas a través del alimento, significan que es difícil estar seguro de haber identificado todas las micotoxinas. Se ha propuesto la determinación de biomarcadores (análisis de micotoxinas en sangre) como el método valido para evaluar la exposición real a micotoxinas. Esto inspiró a Innovad® a desarrollar un servicio más completo que complementa el análisis de alimentos con biomarcadores reales en la sangre de los animales. Este servicio se llama Myco-Marker® y ayuda a la industria a comprender, por primera vez, el riesgo real de micotoxinas y optimizar adecuadamente la estrategia de mitigación.
Innovad ha colaborado con la Universidad de Gante y está financiando investigaciones innovadoras sobre nuevas formas de evaluar el impacto sistémico de las toxinas del alimento y sus productos intermedios en los animales. Esta nueva investigación se centra en la evaluación de la exposición, ya que está identificando nuevos biomarcadores y está desarrollando las herramientas analíticas adecuadas para determinar los metabolitos tóxicos en los biofluidos animales. Este biomonitoreo podría proporcionarnos datos más confiables relacionados con la intoxicación en animales a través de alimentos contaminados y / o estrés in situ. Por ende, tiene un gran potencial de impacto económico significativo en la cría de animales.